Recientemente estoy sufriendo las obras del cambio de tuberías de suministro de agua en mi barrio, con todo lo que esto significa: cortes de calles, desvíos momentáneos para que puedan trabajar la maquinaria y los operarios, ruidos al tener que abrir la zanja hasta llegar a las tuberías para poder cambiarlas y volver a tapar la zanja, para por fin colocar los adoquines.
Obras en una calle cualquiera de nuestro país.
Todo esto genera una gran molestia a los vecinos y a cualquiera que necesita pasar por allí, tanto en coche como andando, además de generar una gran cantidad de escombros y un gran coste al erario público, al tener tanta gente, tanto tiempo trabajando. Es por ello que se me ocurrió pensar en la forma de simplificar este tipo de operaciones y con ello, reducir tiempos de obra y costes.
El primer problema es obvio, las tuberías de servicios (agua, gas, electricidad, telefonía...) están en su mayoría bajo la superficie de la acera y para llegar a ellas hay que abrir una zanja, pero ¿si se construyera una acera técnica, que pudiera albergar todas estas conducciones sin tener que enterrarlas cada vez que tenemos que trabajar con ellas?
Una conducción bajo la acera cuya cubierta sea el propio solado de la acera, que permitiría tener a mano todas las conducciones de las redes de abastecimiento. El recinto enterrado estaría formado por piezas prefabricadas de hormigón, con lo que su colocación sería muy rápida, así como su reposición en caso de rotura.
Para evitar que pudiera abrirse por cualquiera y provocar posibles caídas, las piezas de la cubierta, que tendrían el dibujo que quisiera cada municipio, deberían tener un peso tal que no permitiera su manipulación más que con una pequeña máquina, esto le daría la rigidez suficiente para soportar el paso de vehículos, necesario para permitir el acceso a garajes.
La pieza vertical exterior serviría de bordillo, al estar entre la acera y la calle, mientras que la interior serviría para marcar el límite de la zona técnica. En el caso de ser una acera más ancha que los 1,8-2,00 metros que podría tener de ancho esta estructura, el resto de la acera sería normal y se podrían plantar árboles.
Para garantizar la estabilidad de la trinchera, cada 3 metros habría unas riostras metálicas donde también descansarían las piezas de la cubierta,
El suelo de la estructura tendría una función doble, por un lado servir de apoyo a las conducciones más pesadas, como el saneamiento y el abastecimiento de agua y por otro el de recoger el agua que se colara entre las juntas de las piezas de la cubierta.
En los laterales, habría una serie de bandejas metálicas que permitirían la conducción de todo tipo de cableado eléctrico, así como de tuberías de distribución de gas.
Este sistema permitiría poder controlar mucho mejor las fugas en el sistema de abastecimiento de agua, que en muchas ciudades supone la pérdida del 10% del agua, también reduciría el tiempo de las obras, al evitar tener que hacer excavaciones y tapado posterior de las zanjas abiertas, con lo que reduciría el gasto de las obras.
En los cruces, la cubierta de la estructura puede servir para colocar sobre ella pasos de cebra iluminados o que se iluminen al paso del peatón, lo que que aumentaría la visibilidad y reduciría los atropellos a peatones en los cruces. Todo un abanico de posibilidadesds.